Estados mentales
fuertes... sociedades débiles: Las economías más
fuertes son aquellas que han logrado un mayor dominio de los procesos
productivos, de las técnicas y la tecnología.
Pero hay otro factor que los ha llevado a convertirse en economías
fuertes.
En el caso de Japón
y China si bien después de la segunda guerra mundial se dedicaron al desarrollo
tecnológico lo cual les permitió estar a la vanguardia en este tipo de
desarrollo, un elemento importante que no debe desconocerse es la forma como
dominan la voluntad de los individuos a través
de sus filosofías y costumbres.
Si bien este es un
caso extremo ya que los individuos han llegado a poner su salud física en
riesgo por seguir con las conductas que dictan sus costumbres, podemos anotarlo
como ejemplo de cómo la psicología incide en el desarrollo de una economía.
La comunidad
oriental esta auto programada para la humildad, el honor, el auto control y el
autodominio de la voluntad, y son estos principios los utilizados por las
empresas para incrementar su productividad y aprovechar la gran oferta de mano
de obra existente en los países asiáticos.
Pero todo esto
funciona en una comunidad tradicionalista que aun es regida por principios filosóficos.
Pero en el caso de
los países occidentales, son otros los principios que rigen la psicología
social y el comportamiento de los individuos.
Como ya se mencionó, en países como Estados unidos y Europa el
dominio de la voluntad en favor de la productividad se da a través del nivel de
auto estima y sentido de pertenencia que cada individuo posee, pero esto esta
generado por la condición social, su bienestar económico que constituye su motor
impulsor, motivador a seguir creyendo en su país.
Pero en países
latinoamericanos... y pongamos atención al inicio de este párrafo... con un
“pero”... Cuál es la motivación? Están
convencidos los latinos de las bondades de sus países? No es difícil interpretar y evidenciar por
que un estadounidense o europeo no se
siente motivado a viajar hacia países latinos... y menos establecerse en ellos,
mientras que los latinos no ven la forma como establecerse en países como Estados
unidos y Europa.
La psicología social
de los países latinos se ve afectada por
las depresiones económicas, los conflictos internos, y la falta de oportunidades reales
que lleven a un nivel de vida digno y que cumplan con las expectativas de satisfacción de necesidades, conllevando a
estados depresivos, y por tanto el deseo
de buscar nuevas alternativas de mejoramiento y bienestar en otros países, por
lo tanto los latinos se encuentran desmotivados frente a las bondades de sus países
dado los bajos salarios y las situaciones ya planteadas.
Esta hipótesis es verídica
si tomamos en cuenta la forma como es distribuido el ingreso y la propiedad en
los países latinoamericanos y el alto nivel de pobreza que se evidencia en
ellos.
Ahora bien si pensamos en las sociedades
occidentales a nivel psicológico, los
estados han preferido y pretendido
mantener el control con la sumisión de su población, pero a medida que pasa el
tiempo, con las nuevas exigencias económicas, sociales internacionales, se
evidencia la necesidad de generar un cambio de actitud y la búsqueda del apoyo
de todos los sectores de la población,
en definitiva es evidente la
necesidad de un desarrollo mental en los agentes económicos en busca de
que contribuyan positivamente al desarrollo económico.
Una mente
equilibrada contribuye positivamente a
una economía, una mente enferma crea estragos, aumenta los gastos, disminuye
los ingresos, crea traumatismos económicos y sociales.
No estamos afirmando
que las sociedades de los países latinos estén enfermos mentalmente... pero si
podemos afirmar que poseen algún nivel de deficiencia en cuanto a nivel de
motivación se refiere para apoyar a sus países.
Ganar,
triunfar, tener éxito, motiva a seguir
luchando, a apoyar a nuestros países, uno de los ejemplos latentes y claros es
el deporte y más específicamente el football.
El triunfo de los
equipos invita a seguir adelante, genera estados de euforia, de deseo de
continuar, de luchar, se entra en un éxtasis mental en el cual se olvidan las
limitaciones y los problemas... hay motivación... y sentido de pertenencia, se
incita a continuar apoyando a su equipo.
Por el contrario cuando
se pierde... hay desmotivación y tristeza...
El efecto es
similar con los cambios económicos, aunque menos eufóricos y públicos.
De este modo se
concluye que una sociedad motivada puede ser mas productiva y de igual forma
genera mayor aporte a la producción, que una población desmotivada.
Tanto los consumidores,
como los productores son sensibles psicológicamente a los cambios en la economía
y la economía fluctúa de acuerdo a los cambios psicológicos de dichos
agentes. Por ello afirmamos que las
motivaciones y deseos y más aun la
satisfacción de ellos, son factores determinantes en la actividad económica.
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